
Mitos y realidades de la masturbación en adultos mayores
La masturbación sigue siendo un tema rodeado de mitos, silencios y prejuicios, especialmente entre los hombres mayores de 60 años. Muchos creen que se trata de algo “inadecuado” o “sin importancia”, cuando en realidad es una práctica natural con beneficios comprobados para la salud prostática, emocional y sexual. La Dra. Sol Márquez, uróloga, explica que comprender el papel de la masturbación en la madurez es clave para romper tabúes y cuidar la salud íntima con conciencia. Después de los 60, el cuerpo cambia, sí, pero el deseo, la sensibilidad y la necesidad de placer siguen siendo parte esencial de la vida. 🔹 Mito 1: “La masturbación daña la próstata” Ocurre todo lo contrario. Estudios científicos muestran que la eyaculación regular ayuda a mantener la próstata saludable, reduciendo la inflamación y evitando la acumulación de toxinas.Investigadores de la Universidad de Harvard siguieron a más de 30,000 hombres durante 18 años y descubrieron que quienes eyaculaban 21 veces o más al mes tenían hasta un 33% menos riesgo de cáncer de próstata.En otras palabras, la masturbación actúa como una limpieza natural y protectora de la glándula prostática. 🔹 Mito 2: “Masturbarse después de los 60 es vergonzoso” La vergüenza no protege, al contrario, enferma. La intimidad no desaparece con la edad: cambia su ritmo y su significado. La masturbación es una forma legítima de mantener el cuerpo activo, liberar tensión, mejorar el sueño y reforzar la confianza personal. Después del orgasmo, el cuerpo libera dopamina, oxitocina y prolactina, hormonas que reducen el estrés y elevan el ánimo. Es una práctica segura, natural y saludable, especialmente en una etapa donde el deseo puede fluctuar. 🔹 Mito 3: “La masturbación causa impotencia o pérdida de sensibilidad” No es la masturbación lo que causa daño, sino la práctica agresiva o con exceso de fuerza. Usar movimientos muy intensos o sin lubricación puede generar microlesiones y pérdida de sensibilidad, un fenómeno conocido como “agarre mortal”.Lo recomendable es hacerlo con suavidad y, si es necesario, usar lubricantes neutros.Cuando se practica con equilibrio, la masturbación mejora la circulación, oxigena los tejidos del pene y preserva la firmeza natural, lo que resulta esencial para una vida sexual plena y saludable. 🔹 Mito 4: “Después de los 60 ya no es necesario masturbarse” Uno de los errores más graves. Dejar de estimular el pene por largos periodos puede causar atrofia o fibrosis, reduciendo su elasticidad y función eréctil.Las erecciones —incluso las nocturnas— cumplen una función fisiológica vital: mantener el flujo sanguíneo y la salud de los tejidos.Por eso, la masturbación o la actividad sexual no son solo placer, son también prevención y mantenimiento. 🔹 Mito 5: “La masturbación reemplaza el contacto con la pareja” No reemplaza: complementa. El autoconocimiento sexual ayuda al hombre a entender mejor su cuerpo, sus tiempos y sus límites, lo que fortalece la comunicación y la intimidad con la pareja.Masturbarse no es un acto de soledad, sino de autocuidado y conexión con uno mismo. La clave está en vivirlo sin culpa y con naturalidad. Conclusión: el cuerpo pide cuidado, no silencio La madurez no es el fin de la sexualidad; es la oportunidad de vivirla con más conciencia y equilibrio.Cuidar la salud íntima es cuidar la autoestima, la energía y la longevidad.Hablar abiertamente de masturbación es un acto de salud, no de vergüenza. 👉 Si quieres entender cómo esta práctica influye en la próstata, el sueño y la vitalidad masculina, mira el video a continuación de la Dra. Sol Márquez, donde explica con claridad la ciencia detrás de este tema tan importante.
